Pliometría: Que es, para qué sirve, y ejercicios útiles
Pliometría ¿A poco no suena como una ciencia avanzada? Pero que va, nada más cerca. En realidad, se trata de una técnica de entrenamiento que cada día está sonando más entre los atletas que buscan aumentar su velocidad, explosividad y fuerza, pero ¿En qué consiste?
De eso, y de mucho más vamos a hablar más adelante. Además, os dejaremos algunos ejercicios de pliometría que puedes usar para obtener mayor velocidad o fuerza y mantenerte siempre sano.
¿Qué es la pliometría?
Los ejercicios pliométricos son un tipo de entrenamiento físico que combina movimientos rápidos y fuerza para obtener mayores capacidades a las habituales.
En general, cualquier ejercicio que use el reflejo miotático de estiramiento para una respuesta más fuerte de contracción muscular, es considerado pliométrico.
Fases de la pliometría
La pliometría comprende 3 fases. Estas consisten en:
· Absorción de fuerza (excéntrica)
· Ruptura (isométrica)
· Aplicación de fuerza (propulsiva)
¿Quién debería hacer uso de la pliometría?
Este tipo de ejercicios están pensados para deportistas que quieran mejorar su rendimiento motor. Claro está, que requieren de cierta experiencia, fuerza y trabajo en el cuerpo.
Incluso, los especialistas lo recomiendan para deportistas que requieran de una mejora, sin embargo, cada ejercicio puede requerir una técnica y condición física que puede ser más avanzada, o relativamente básica.
¿Quién no debería aplicar este tipo de ejercicios?
Debido a que la pliometría requiere de impactos con frecuencia, es un tipo de ejercicios que no se recomiendan para quienes practican poco ejercicio y son sedentarios.
Tampoco es recomendado para quienes padecen de sobrepeso, ya que ese peso adicional podría lastimarnos y darnos el efecto contrario al que necesitamos tener.
De la misma forma, personas con lesiones deberían consultar a su médico antes de practicar ejercicios pliométricos, ya que puede resultar riesgoso.
Es decir, que se trata de ejercicios pensados por y para personas atléticas, y no para iniciados en la materia, y no tanto por el nivel de complejidad, sino más bien por el nivel de impacto que puede causar en el cuerpo.
Ejercicios pliométricos que debes poner en práctica
A continuación, dejamos algunos ejercicios pliométricos bastante interesantes que podéis poner en práctica:
· Posiciónate como si fueses a hacer flexiones. Luego, sin arquear la espalda, sube los pies con un ligero salto a la altura de las rodillas.
· Estando de pie, y con los pies a altura de los hombros, realiza saltos de un lado a otro, curveando un poco la cadera.
· Corre en un solo lugar subiendo las rodillas a altura del pecho, lo más alto posible.
· Posiciónate como si fueras a hacer sentadillas, con las manos adelante, y luego baja hasta que no puedas más, estando de cuclillas, y ve realizando pequeños saltos sin tocar el talón del suelo
· De puntillas en el suelo, abre y cierra piernas como una tijera con saltos. Puedes alternar entre usando o no los brazos.
· Con obstáculos saltables de una altura adecuada, posiciónalos y sáltalos con ambas piernas. No dejes prácticamente espacio entre cada obstáculo. No se debe correr entre obstáculos, solo saltos.
· Nuevamente con obstáculos saltables, repite el ejercicio anterior, pero saltando de lado en esta ocasión con ambas piernas.
· Ponte de pie con los pies a altura de los hombros, baja a cuclillas y salta con potencia con las manos arriba juntas. Intenta utilizar la máxima potencia de tus piernas.
· Ponte en cuclillas, con las manos delante tocando el suelo. Toma potencia, y salta como rana aterrizando en cuclillas y repitiendo.
Importante: Todos los ejercicios pliométricos anteriormente mencionados deben ser realizados con velocidad y fuerza para causar impacto positivo. Puedes crear una rutina de acuerdo a tus capacidades actuales.
